María Algora es una actriz y creadora española afincada en Madrid y con residencia en Vitoria-Gasteiz.
Comenzó sus estudios de Arte Dramático con 17 años en Arte 4 Estudio de Actores y los formalizó con el Máster en La Central de Cine. Mientras, lo fue compaginando con el grado en Realización de Audiovisuales en el CIFP José Luis Garci. Ha continuado formándose con Fernando Piernas, Andrés Lima, Carlota Ferrer, Adán Black, entre otros.
Acaba de terminar el rodaje de Lo que no se ve, su nuevo proyecto como creadora, coprotagonizado junto a Itziar Lazkano, y cuenta con la participación de Ramón Barea. Una historia donde aborda la salud mental y las relaciones familiares.
Las ganas de contar sus propias historias la han llevado a presentar sus proyectos en distintos festivales. En 2019 funda la productora Bedmar Films, para hacer cine de manera independiente y estrena su ópera prima, Árbol, para hablar sobre los bebés robados. Con la llegada de la pandemia de 2020, crea y organiza desde casa el Cuarentena Film Festival. En 2022 estrena su segundo cortometraje, La Nadadora, que protagoniza junto a Alejandro Pau para hablar del bullying y los complejos en la adolescencia.
En 2021 participó en Josefina, la primera película de Javier Marco. En 2023 estrenó Las frases de las historias que escribo de Débora Izaguirre, trabajo que le valió la nominación a Mejor Actriz en el Vienna International Film Awards. En 2024 participó en la serie Eva & Nicole, proyecto para Atresmedia.
María ha participado en distintos montajes teatrales entre los que destacan Nada que pueda morir de Mikel Bustamante, This Restless House, una versión de La Orestiada dirigida por Adán Black, Pentesilea, tragedia griega de Heinrich Von Kleist, dirigida por Ramón Quesada, o El Malentendido dirigida por Claudio Sierra.
Suele encontrar en la dirección escénica un lugar de continuo aprendizaje. Es por ello por lo que ha trabajado en la ayudantía de dirección de los montajes Los Espejos de Don Quijote y Reasons to be Pretty.